Casa Enraizada
Desde el primer día que visitamos el lugar, el entorno empezó a construir la vivienda...se buscó ubicar el edificio en la zona más alta de la finca, con el fin de poder maximizar las horas de luz y obtener las mejores vistas hacia el valle, con el sonido del río Alcaraz de fondo.
Dos piezas, una menor de servicios, aparcamiento e instalaciones, y una mayor de estancias. Siempre percibimos la casa como un refugio, un hogar donde guarecerse de la intemperie pero disfrutando de ella, de manera que el resultado fueron dos planos inclinados y prolongados respecto a los límites del cerramiento, dos planos que casi se besan para marcar la zona de entrada, en donde se genera una plaza propia de transición. La orientación sur pura de la fachada principal hacia el valle, se muestra como unos prismáticos personalizados, aumentando la eficiencia energética de la vivienda con el vuelo.
En cuanto a la materialidad, piedra, revocos continuos en crema y tabaco, hormigón claro, teja terrosa, adoquín rojizo, madera alistonada,...siempre se ha pretendido integrar la vivienda en su ubicación, respetando al máximo la naturaleza inmediata. El conjunto se complementa con gestos puntuales, como curvar las esquinas, sujetar el vuelo con unas ramas que parten del suelo, e incluso establecer el salón-comedor en dos niveles, para sentarse en el estar y ver el "cuadro" exterior...enraizarse con la tierra.
Estado: Obra finalizada / Cliente: Privado / Arq.Técnico: Estudio Arquisol S.L.P / Ingeniería [Ins y Est]: David Luján López / Constructor: Jose Julián Carrasco Martínez